miércoles, 23 de octubre de 2013

Fragmento de "Ya me habré ido"

"Estábamos todos allí sentados, mirándonos las caras y sonriendo falsamente. Y él estaba entre todos, cenando tranquilo como si nada hubiera pasado, como si yo aún tuviera el corazón de un solo pedazo y él siguiera siendo el amor de mi vida... La comida no bajaba por mi garganta, apenas podía llevármela a la boca, y continuamente sentía arcadas en el estómago. No podía mirarlo, no podía fingir como él que no pasaba nada, tenerlo allí de frente, tan cerca pero más lejos que nunca. ¿Cómo había sido capaz de hacerme esto? Entre sonrisa y sonrisa empezaron los brindis, veía las copas subir y encontrarse, oía las risas y las palabras vacías de sentido. Sentía un enorme nudo en mi garganta y un calor enorme en mis manos. Agarre mi copa de vino con fuerza, para que no me flaquearan las ganas y me levante. No llores, me decía a mí misma y brinda. Entonces Emilie subió su copa y brindo:
- Brindo por aquellas personas que duermen de noche sin importar lo que hayan hecho durante el día - La mesa quedo en silencio y brindaron. Se miraban unos a otros como si ella hubiera perdido la cabeza, y lo que estaba haciendo fuera lo más incorrecto que se había hecho jamás. Pero Emilie no iba a parar, para cuando todo aquello explotara ella ya se habría ido. Así que agarro su copa por segunda vez, con más fuerza si cabe, le miro a los ojos y llevo la copa en alto al centro de la mesa y brindo...
-Brindo por todos aquellos que son capaces de mirarme a la cara durante el día a pesar de saber lo que hicieron durante la noche... - En medio de aquel silencio en el que nadie se movía, se llevo la copa a sus labios y bebió todo de un solo sorbo. Despacio, sin dejar de mirarle, dejo la copa en la mesa y le dedicó la mejor de sus sonrisas, la mas triste de todas sus sonrisas, al que ya no iba a ser más nunca el amor de su vida. Cogió su bolso y dejo sobre la mesa su móvil. -No me busques - dijo. - He perdido tantas cosas en este camino, que ahora al irme es cuando me doy cuenta de que no me llevo nada. Será como si nunca hubiera existido. Adiós. - 
Ando sin parar hasta su coche, encendió un cigarro y lloró tranquila. Iba a empezar una nueva vida, lejos de ellos, de todo, de él. Nunca más nadie le haría daño, nadie volvería a ser alguien importante en su vida, iba a sobrevivir a todo esto. Empezó a conducir, no sabía a donde iba pero si sabía a donde jamás iba a volver. "

lunes, 21 de octubre de 2013

Fragmento de "Algún día me sentaré y te contaré algo..."

"Van pasando los días, y el infierno en el que se convirtió mi vida se va apagando. He perdido tanto que ya no tengo nada, y hacemos cosas peligrosas cuando no se tiene nada que perder. Estoy sentada frente al televisor, no sé muy bien que estoy viendo, porque mi cabeza está reamueblándose. Cojo un cigarro y lo enciendo, fumo despacio y me calmo. Hago planes de futuro, divago de un sitio a otro en mi cabeza. Pronto llegarás, el único problema que veo es que yo no volveré jamás, de repente estoy aquí dentro encerrada, y ella... esa chica alegre y despreocupada ha tomado el mando, y yo me mantengo a salvo en una segurísima segunda o tercera fila. No volveré a exponerme nunca más, nunca más, nunca más, me repito. Dejo que el frío se me cale hondo en el cuerpo, de alguna manera el dolor físico me alivia el desazón que tengo en el alma. En breve ella empezará la obra de teatro, y yo me quedaré aquí agazapada, protegida, asustada. Planteándome si no será mejor que ella se quede al mando para siempre. Me pregunto que opinas tu de esta nueva chica, me pregunto si te parece bien que ella se quede, si te gusta tanto como te gustaba yo, si te parece bien que yo me quede aquí escondida para siempre, sino me echas de menos, sino te percatas de que ella no soy yo, sino de que solo es una sombra de la sombra de lo que soy."
Puede que uno sufra más por lo que cree que pasa, que por lo que pasa en realidad. Pero que es la realidad sino un cumulo de sensaciones y situaciones que nos rodean, como dejar la subjetividad a un lado y ser fieles a lo que vemos, no lo sé. Ha pasado tanto en estos dos meses, he vivido tanto y sufrido tanto, ya sea por lo que yo creo que pasa o por lo que pasa. He perdido tanto que me he quedado sin nada, y desde esa nada he tenido que empezar de cero. Busco el perdón dentro de mí para poder perdonar, busco similitudes y respuestas en situaciones que yo haya vivido antes para poder comprender lo que pasa ahora. Hay días en los que logro conciliar la paz, cada vez se va haciendo más llevadero todo y voy aceptando lo que me llega. Abrazando los momentos y disfrutando de cualquier instante que me regale la vida. He tenido que dejar de lado algunas metas y algunos sueños, sustituirlos por otros y readaptarme. La vida no va como uno la planea, simplemente va... Podemos vivirla como nos llega, podemos luchar para cambiarla, podemos modificarla, aceptarla, transformarla, disfrutarla, pero de ninguna de las maneras podemos dejarla pasar. Así que lo que he hecho es todo eso, he aceptado lo que me viene, he cambiado lo que considere que me hacía daño y disfruto de lo que voy reconstruyendo. Ojalá todo fuera un poco más fácil, pero no lo es. Nada es fácil... Pero pocas son las cosas que considero imposible, y ser feliz no es una de ella. Voy resurgiendo de lo que quedo de mí hace dos meses, voy curando poco a poco mis heridas, y trabajando despacio mi interior. Hay muchas cosas que aún no sé, muchas que me quedan por experimentar. La vida continúa,  no voy a dejar que lo haga sin mí...

domingo, 13 de octubre de 2013

Antes no...

Búscame cuando te apetezca, cuando notes que me echas de menos, cuando te mueras de ganas de tenerme. Búscame cuando no tengas a nadie que te diga que te quiere. Búscame cuando eches en falta las risas, las caricias que erizan la piel, las conversaciones sin rumbo, los abrazos en los malos momentos y las locuras. Búscame cuando necesites alguien que te sorprenda, cuando te des cuenta que nadie tiene esos detalles. Búscame cuando necesites que te digan lo especial que eres, lo bonita que es tu sonrisa, lo bien que lo haces y lo guapo que estas cuando te concentras. Búscame cuando mires el móvil esperando una llamada que ya no llega , cuando salgas y sin darte cuenta divagues con la mirada entre la gente, cuando inesperadamente alguien te toque la espalda y al girarte esperes que sea yo. Antes no lo hagas, porque no estaré...
Maldito el momento en que te hice mía si dices adiós y te amo todavía. Maldita las ganas de volver a verte si ya te he perdido, maldita suerte de quererte aunque se caiga el mundo, vivir para ti morir cada segundo. Maldita la hora en que nos prometimos alcanzar el cielo, y el cielo se desplomo, Ya sabes que te adoro y adoré, tal vez no fue bastante, tal vez me equivoqué…





La confianza sube en escaleras y baja en ascensor...
Debes destruirme con la verdad, porque si jugamos a las mentiras no tengo rival...